Pues aquí está el objeto creativo, una taza porta-galletas. La idea se me ocurrió cuando, en el camino desde la cocina a mi habitación , y cargado con una taza de leche con cacao muy caliente en una mano y una cuchara, un paquete de galletas, servilletas y algún que otro artilugio más de cocina en la otra mano; se me calleron las galletas al suelo, y como acto reflejo intenté cogerlas con la mano en la que tenía la taza. Os podeis imaginar el resto. Pero si no hubiese tenido las galletas en la mano esto no habría ocurrido. Algunos dicen que a veces merece la pena hacerse otro viaje, pero yo soy de los que prefieren matar dos pájaros de un tiro, y si en vez de dos son cinco o seis mejor (en sentido figurado, no seais mal pensados). La conclusión de todo esto es el objeto de la fotografía.
El que yo he hecho es simplemente una taza con un cilindro hueco de cartulina, con su correspondiente base, y un rectángulo en su parte anterior para meter las galletas. No os aconsejo que lo probeis en casa con la taza llena, igual teneis un accidente. Va a ser mejor esperar a que alguien lo haga de un material más consistente.
